comer rezar amar

El jueves de la semana pasada fuí al cine con Marilú. Quizás estaba particularmente sensible, pues la película me hizo conmoverme en varias ocasiones. Julia Roberts es una actriz que luce en sus actuaciones sin necesidad de ser sofisticada. Admiro a las mujeres mundanas, terrenales, sencillas. La historia se desarrolla en Italia (comer), en la India (rezar) y en Bali (amar). Se basa en un libro, que debe ser bastante bueno. La película me hace reflexionar acerca del contraste que hay entre la vida de los americanos y lo que sucede en otras partes del mundo. La visión de la escritora es algo crítica. Eso explica también la atracción que existe hacia las personas latinas, en este caso, el personaje de Javier Bardem que logra una gran simpatía .

Rocío ya está contratada en el despacho de consultores. Se nota emocionada. Yo le digo que es una muy buena oportunidad. No va a ganar mucho al principio, pero va a aprender mucho. Pienso que al fin encontró algo mucho mas apropiado a su personalidad. Tiene una plataforma, por su carrera, por sus anteriores trabajos, pero ahora puede aprovechar sus conocimientos y combinarlos con su potencial. Además el sábado dió una clase en la UNIVA y regresó muy contenta. Se dió cuenta del potencial que tiene en el area de la docencia, donde nunca quiso entrar. Parece que al fin está en el camino adecuado, y que los obstáculos que se le presentaron le sirvieron para llegar a esta posibilidad.

Ayer fué un día crítico para el proyecto de la facturación electrónica. Me llegó el programa, lo empecé a probar y salieron algunos detalles que en el transcurso del día se fueron solucionando. El mayor susto fué cuando hice la validación de los archivos en el SAT, y me marcó que el sello digital no era válido. Al parecer está solucionado, pero estoy en espera todavía de la versión corregida.

Ayer también recibí tres llamadas de American Express, a través de SERTEC. Llamadas largas que no intenté acortar según las instrucciones de Resuelve tu deuda. Pienso que estoy aprendiendo la mecánica. A veces es importante llevar la iniciativa. Decidí atacar, mientras ellos me argumentaban que no van a negociar con terceros, les hice ver que el único problema que tengo es con ellos, pues las demás tarjetas ya están en vias de negociarse. Ellos tienen datos acerca de que manifesté tener un negocio, pero es fácilmente demostrable que ya cerró. En algún momento, uno de ellos me preguntó que cuanto podía pagar, y le dije que solamente contaba con $10. También le comenté que mi hija estaba desempleada y mi esposa enferma, y entonces me preguntó que si se presentaba una emergencia que iba a hacer, a lo que le dije que la llevaría al IMSS. Luego me dijo que en caso de que me demandaran, tendría que pagar un abogado y me iba a salir mas caro, entonces le dije que tendría yo que pagar con cárcel, y entonces me dijo que eso no lo ameritaba, a lo que respondí: que bueno, gracias a Dios. Las llamadas suelen alterarme, pero es algo que debo aprender a controlar. Un reto que debo aceptar. Un duelo de esgrima mental y oral. Finalmente ellos están adiestrados para hacer su labor, y yo debo ser muy firme en mis convicciones para salir adelante. No me debo salir del script.

Entiendo que de haber seguido como estaba, al cabo de tres años seguiría pagando $20,000 al mes, con la misma deuda de siempre, y sin posibilidades de salir del mismo hoyo. Ahora quizás estaré pagando $5,000 al mes, pero en tres años o antes seguramente estaré en otra posición.

Oscar III atraviesa por una etapa difícil. Mannatech no le ha resultado tan bien como él esperaba. El trabajo en Terrazana es pesado, aunque le está ayudando en su economía. Y lo que está descuidando un tanto es la escuela.

Marilú hoy fué a su comida en el CRIT. Ayer tuvo un desayuno con su amiga Maite, y se prolongó hasta la tarde.